Más que un concierto fue una entrañable conversación. Luis Pastor, junto a Lourdes Guerra, nos contaba y nos cantaba y L’Auditori Barradas de L’Hospitalet parecía el salón de su casa, en el que nos congregamos numerosos amigos.
Nos confesaba su admiración por José Afonso, y lo mucho que de él aprendió, y al mismo tiempo nos dio una lección magistral de autenticidad, de sencillez, de memoria, de compromiso… de belleza.
Nos regaló algunas canciones nuevas, nos cantó «Sóc» con Joan Isaac y nos recomendó un antídoto contra el chovinismo imperante. Y, sobre todo, nos puso la carne de gallina.
El sonido, a cargo de Juanma Carmona, de lujo.
Os dejo el enlace a uno de los vídeos que grabó ayer José Luis Martinez (¡infatigable!):